Sensaciones Termicas en el Polo. I. Temperaturas veraniegas.

Cuando uno escucha las temperaturas que se alcanzan en el Polo Sur, una de las cosas que te preguntas es, “¿Qué se siente a esas temperaturas? ¿Hay diferencia ente -20C y -60C o a partir de una cierta temperatura ya no se nota?”. A través de esta serie de videos “Sensaciones Térmicas en el Polo”, vamos a intentar descubrirlo. A lo largo de estos meses he ido grabando las sensaciones que experimentaba en saltos de 5C empezando por los -20C y hasta los -75C que es la mínima que hemos alcanzado hasta ahora. Durante unas horas se superaron los -15C, e incluso se batió el record de ‘calor’ durante el día de Navidad de 2011, pero no lo tengo grabado (la famosa foto del record la habéis visto ya de sobra, así que no la voy a poner de nuevo :)). En el otro extremo, sólo se han alcanzado los -80C en muy pocas ocasiones, así que no es probable que lo veamos.
Sven y yo bromeando este verano. No todo el mundo percibe el frio de la misma manera, aunque hay formas objetivas de medir el riesgo de congelacion.
  Hay varios factores que influyen en la percepción del frío. Aquí en el Polo la humedad en el ambiente es muy baja, por lo que el cuerpo pierde calor a menor ritmo que en una atmósfera húmeda. Eso hace que de entrada, las temperaturas no se perciban de manera tan extrema como uno podría imaginar. El viento es otro factor importante y como podéis imaginar, se pasa mas frío en un día ‘templado’ pero ventoso que en un día relativamente más frío, pero calmado. Por eso, a la hora de salir fuera, no sólo miramos la temperatura en las pantallas, sino el viento y lo que se conoce como ‘Windchill’ o sensación térmica.
Tabla de sensacion termica. Fijaos que aqui durante el invierno estamos siempre en la zona extremadamente peligrosa, incluso hemos llegado a alcanzar los -100C, que ni siquiera aparecen en la tabla!
  Una curiosidad respecto al Windchill es que quien propuso el nombre y lo estudio por primera vez fue Paul Siple, que fue el director de esta base durante el primer invierno en 1957. Siple había acompañado a Rychard Byrd en 3 expediciones antárticas, la primera de ellas, siendo todavía muy joven. Byrd fue el primero en sobrevolar el Polo en 1929 y en nuestra sala de conferencias se guarda como pieza de museo el jersey que llevo en aquel vuelo. El caso es que como resultado de la experiencia acumulada en esas expediciones, Siple propuso un índice en su tesis doctoral que tenía en cuanta la temperatura y el viento a la hora de evaluar el riesgo de congelación. En posteriores expediciones, y con experimentos específicos, refinó ese índice y se definió una temperatura ‘equivalente’, que, aunque ha evolucionado posteriormente, es lo que solemos escuchar en los partes como ‘sensacion termica’. Básicamente, a una cierta temperatura, y con un viento dado, tenemos el mismo riesgo de congelación que a la temperatura ‘equivalente’ o ‘windchill’ correspondiente. Como uno de los mayores expertos mundiales en ‘frio’, el ejército americano fichó a Siple durante la segunda guerra mundial para asesorar en la forma de vestir a los soldados en el frente, ya que las congelaciones no eran infrecuentes.
Paul Siple, director de esta base durante el primer invierno, 1956/57, fue incluso portada de TIME.
Paul Siple, escribio un libro sobre la experiencia del primer invierno aqui realmente recomendable (90 grados Sur) del que tenemos un ejemplar en nuestra biblioteca polar, que lei no hace mucho.
El windchill no es una medida perfecta, pero desde luego, da una indicación bastante fiable del riesgo de congelación, y aquí en el Polo es muy útil, porque a veces, las sensaciones engañan. Yo en estos videos no he pretendido hacer un estudio riguroso de las sensaciones térmicas, sino simplemente recoger las sensaciones subjetivas que iba percibiendo. En general es difícil notar la diferencia de un escalón a otro, pero sí iréis notando cambios apreciables de un bloque a otro. Todos los videos están grabados en la terraza de la estación salvo los -20C y los -25C. En este primer bloque de ‘temperaturas veraniegas’, experimentamos las temperaturas entre -20C y -30C. Seguramente, estas temperaturas en un clima mas húmedo crearían una sensación muchísimo peor. Como veréis, se puede aguantar (un rato) con una manga larga fina y salvo que sople mucho viento, se puede estar perfectamente a cara descubierta. Ahí os dejo con el video: Temperaturas veraniegas  

8 comentarios en “Sensaciones Termicas en el Polo. I. Temperaturas veraniegas.”

  1. Pues te diré que encuentro increíble esto que nos muestras en el vídeo, Carlos…increíble porque nunca he estado en un ambiente tan seco!
    Muy buena tu explicación, al menos para hacernos una idea de lo que influye el viento en esa sensación térmica.

  2. Por cierto, me gustaría que también nos contaras qué significa que el sol esté -15º bajo el horizonte? Creo que en cuanto empieces a notar que asoma la luz….tendrás una sensación de pérdida, porque esta experiencia de la noche tan larga se irá y ya no volverás a tenerla….¿has pensado en eso? Me emociona pensar en el momento en que nos digas «hoy se aprecia menos oscuro, a pesar de que no hay luna», por ejemplo!

    1. Gabriela! has entrado en el facebook? Hace un par de dias contaba justamente eso, puse la primera foto en que se ve algo de resplandor del sol, y contaba las sensaciones. Tambien la puse aqui como foto del dia.
      Respecto a la elevacion del Sol, de la misma forma que en verano la medimos respecto al horizonte en grados positivos, durante el invierno, el Sol esta bajo el horizonte, no lo vemos, pero es posible calcular como de bajo esta. Justo a mitad del invierno llega hasta los -23.5 grados (90 grados son un angulo recto). Veras que cada dia ese numero es un poquito mayor (menos negativo) y el dia que sea 0 (mas o menos) es el dia que saldra el sol por el horizonte, aproximadamente el 21 de septiembre.
      besos!

      1. Tienes razón, acabo de verlas en facebook…y mira tú que yo ya estaba pensando, al ver esos -15º , en que ya empezaría a «amanecer»…y en que se te acaba la experiencia de la larga noche…
        Preciosas fotografías, y si andabas a los tropezones, es por el viento, que fabrica los sartrugis…¡que fantástico! Es envidiable esta experiencia de vida, Carlos, y junto a tí somos varios los que vamos sintiendo y aprendiendo…
        Gracias mil, y de aquí a septiembre no falta nada…¡que pena! jeje

  3. Saludos Carlos ,hoy a 10-8-12 y varios dias estamos en Gallur y provincia a 40 grados centigrados sobre oº «nos vendria bien algo de fresco» vives en un ambiente estremo,pero aqui no olvidamos el cierzo en invierno,seria instructivo hacer unas escalas del tiempo parecida a la tuya,un abrazo,,,,

  4. Gracias por el trabajo.
    La primera vez que dormí en un iglú me pude desnudar en su interior, ya que fuera estábamos a -18 en los Aquilianos ( León) disfrutando de una ola polar que barrío la Península.
    Con ello quiero destacar también el concepto de «relatividad» térmica. Mi sensación al entrar en aquella cueva blanca fue bastante superior a los -2 que realmente había.
    Un abrazo.

    1. Los de la expedicion del catamaran polar de Larramendi comentaban que dentro de la tienda tenian 0C y les resultaba totalmente confortable. Comparado con los -30C de fuera seguramente es un lujo 🙂
      un saludo!

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